martes, 29 de enero de 2019

SÌNTESIS: TALLERES (RE) - ESPAÑOL


En Remedios de Escalada jugaban Talleres y Español cuando a los 12 minutos de la primera mitad, producto de los incidentes en el ingreso a la popular local entre hinchas y policías, el árbitro Germán Bermúdez decidió suspender el cotejo.


   La reanudación del torneo para Gallegos y Tallarines resultó trunca. En Timote y Castro se jugaron solo 12 minutos y las ganas de ver fútbol quedaron postergadas debido a que en las inmediaciones del estadio se escucharon varias detonaciones de la policía y Germán Bermúdez se vio obligado a suspender el encuentro.

   Era un partido de “bajo riesgo”, a pesar de la suma exagerada equivalente a 80 efectivos que tuvo que pagar Talleres con 48 horas de anticipación. Unos 88 mil pesos según un comunicado oficial de la institución de Remedios de Escalada. Pues es conocida la buena relación que hay entre la gente de Talleres y de Español, una amistad que data de 40 años atrás.

   Sin embargo, el operativo de seguridad no logró llevar a cabo correctamente una tarea, a priori, sin demasiadas complicaciones y enseguida comenzaron los disturbios. Los encargados del ingreso, al ver camisetas españolistas que se acercaron a presenciar el cotejo (como suelen verse de Talleres en el Bajo Flores), comenzaron a pedir documentos, negándoles la entrada a aquellas personas que no tuvieran domicilio en las adyacencias del estadio.   

   Fueron cinco minutos de desmanes y nerviosismo que se trasladaron al campo de juego. Inmediatamente, el árbitro Bermúdez detuvo el partido aguardando por alguna respuesta. Cuando la tranquilidad volvió a Escalada, se sumó otro inconveniente: el generador provisto por la empresa de televisión se rompió y había que esperar el repuesto. Transcurrida una hora, y al volver la luz, la decisión estaba tomada y la suspensión era un hecho.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario